Alquiler en La Barra: animada sosiego y sports acuáticos
Propiedades en alquiler en La Barra, en proximidad de Punta del Este
A sólo diez km de Punta del Este, en la orilla este del arroyo Maldonado está La Barra, una chiquita aldea balnearia cuyos habitantes permanentes no llegan a quinientos.
Es un paraje lleno de magia que mantiene intocado el primor de sus orígenes como pueblo de pescadores, con sencillas y alegres casas y calles planeadas para llegar fácilmente al mar. Lugar elegido por muchos viajeros, se ha acomodado a ellos con una variedad de lugares para comer y bares pero sin perder su esencia de pequeño pueblo.
Una arquitectura con estilo propio
La Barra nació como un viejo puerto de pesca y un lugar de vacaciones de los residentes de Maldonado. A sus sencillas y alegres construcciones originales se agregaron con los años algunas casonas de elegante porte que le dan ese toque ecléctico al lugar.
Sin embargo, las regulaciones municipales han podido evitar que la construcción arrasara con el primor.
Enormes mansiones junto a modestas casas de pescadores
Una magia particular se derrama por toda La Barra. Viviendas que todavía conservan ese toque, rústico, de pequeño rancho de pescadores se codean con ostentosas mansiones situadas sobre las costas, con jardines enormes y piscinas que casi están sobre la playa.
Mas lejos de desentonar, el conjunto es muy agradable y colorido y se logra congeniar un ambiente rústico y en cierto sentido despojado, lejos del ruido de una ciudad balnearia, con una excelente calidad de servicios.
Como vestigio de ese tiempo que todavía no se fue por completo, sobre la margen del arroyo, aguas arriba de los puentes, hay algunas casas donde viven pescadores, varios de ellos continúan su trabajo de pesca artesanal en la desembocadura del arroyo, en La Gorgorita, un paraje lleno de rocas y pintoresco.
Puentes ondulantes las unen
Este pueblo se comunica con la Península a través de dos puentes ondulantes de diseño que asombra y que no acaban de generar admiración y de atraer por sí mismos a miles de viajeros. Los puentes fueron inaugurados uno en 1963 y el otro, una réplica fiel del primero, ya en este siglo, para ponerse a la altura de la enorme cantidad de vehículos que cruzan diariamente para pasear. Cuando no estaban los puentes, para arribar desde Punta del Este era necesario cruzar en balsa.
Gran cantidad de deportes acuáticos
Son notables de la zona sus playas, que a su belleza suman olas de tamaño considerable que permiten todo tipo de actividades deportivas: surf, windsurf, motosky, esquí acuático, yachting, ganotaje, pesca en kayak, entre otros.
Playas como Montoya, Bikini, El Chorro, Manantiales y Punta Piedras, todas con sus particularidades propias, forman una serie que tiene muchos adeptos cada año.
A su vez, el fácil acceso de las casas al mar y el ambiente tranquilo hacen que sea un lugar muy visitado por grupos familiares.
Por esta razón muchos turistas optan tomar como base de residencia a La Barra, desde la cual resulta posible ir a recorrer otros sitios como Punta Ballena, Península, José Ignacio o incluso más hacia el norte.
El fácil acceso al mar
La posibilidad de rentar en La Barra de casas muy próximas al mar hacen de este lugar uno de los más elegidos.
Ya se sabe lo molesto que puede ser el traslado diario al mar, con gran cantidad de cosas que llevar, especialmente cuando tenemos niños. Aunque sea en auto, esto significa cierto esfuerzo de preparación, algo incompatible con el descanso de las vacaciones.
Poder ir y volver a la casa rápidamente agrega mucho al confort.
En esto La Barra tiene mucho para ofrecer, porque allí, es posible tener casas a pocos metros del mar o sólo algo más allá, casi ocultas entre los árboles.
Es una oferta de confortables casas de todos los tamaños, de algunas pequeñas de ambientes hasta otras colosales de muchos cientos de metros cuadrados cubiertos, más rústicas o más sofisticadas, con pequeños jardines o con enormes parques, con o sin pileta, que permiten a cada familia hallar lo que busca según su bolsillo, siempre dentro de un ambiente encantador.
Pubs, galerías artísticas, y ”antiques”
El ambiente de armonía y sosiego se complementa con un alegre movimiento entre los lugares para comer de diversos estilos ubicados en el centro de La Barra, así como bares y lugares para bailar, amén de las galerías artísticas y muchos negocios de antigüedades, estudios de decoración que se ubican sobre la Ruta 10, que parte el lugar en 2, camino a José Ignacio.
Al anochecher, el lugar se llena de luces. Contemplar el atardecer desde el puente y ver cómo de a poco se encienden las luminarias en ambas orillas del arroyo Maldonado es algo imperdible.
Quienes deseen acabar el día con una salida divertida podrán arribar rápidamente al centro de La Barra para ir a algún pub. Quienes prefieran descansar, podrán hacerlo sin problemas en la silenciosa área residencial.